Cuando tenía 11 años, cuando le preguntaron por primera vez "¿qué harás cuando sea mayor?" pensó "Quiero diseñar coches". Entonces la vida dio muchas vueltas y, aunque hoy en día Luca ni siquiera tiene coche, no ha perdido su apetito por el diseño.

Nacido en Milán en 1981, Luca se empapó de la carrera de sus padres (ingeniero y diseñador de interiores) moldeando sus intereses y creando conciencia tanto por la estética del diseño como por el dibujo técnico. Después de una educación secundaria científica, se decantó por los estudios de medios en la universidad hasta que, en 2006, se mudó al Reino Unido.

Entre Londres, Lincoln y Leeds, durante 10 años, tuvo varias carreras, desde probador de videojuegos hasta gerente de proyectos digitales, pero no fue hasta su regreso a Londres en 2011 que Luca comenzó a desarrollar un nuevo interés por los muebles.